domingo, 4 de diciembre de 2016

3 de Diciembre de 2016

3 de Diciembre de 2016.
El dolor invade mi cuerpo y corazón una vez más, mis lágrimas no pueden dejar de salir ¿Cómo dejar de sentirme así? ¿Cuándo llegué al punto de contar cada segundo que falta para que termine el día? Y por que lo hago si aunque anochesca el dolor no se va, al contrario, crece.
No necesito que la gente a mi alrededor me diga, me recuerde lo poco que él me quizo, lo poco o nada que le importa que haya roto mi vida, que me digan lo tonta, estúpida o peor lo "fuerte" que soy. Que me repitan una y otra vez que esto es sólo pasajero, que estoy exagerando las cosas, o que son pretextos para estar todo el día en mi habitación.
¡Dios no! Ya basta. Estoy consciente de todas y cada una de ellas, se que él está bien, se que para él fue fácil incluso satisfactorio librarse de alguien como yo, que no le importa que siga llorandole cada noche, que fui tan fácil de reemplazar.
Se que soy una niña tonta, estúpida, ingenua, por creer que esto sería el cuento de hadas que tanto me contaba mi padre de niña, que yo sería feliz por siempre y que él cuidaria de mi.
Dios, no soy "fuerte" soy frágil, demasiado, me asusta escuchar que la gente diga que lo soy cuando bien sabemos que no es así, siento que esperan algo de mi, algo que me encantaría darles, pero al saber que no puedo, eso, eso me rompe aún más.
Desearía que todo pasará ya, desearía que esto realmente fuera un pretexto,  que mis malditos sentimientos no existieran, que pudiera olvidar, incluso que lo pudiera reemplazar con alguien más, desearia poder odiarlo, desearía no haberlo conocido nunca.
Quiero cerrar los ojos y que al abrirlos me encuentre en otro momento de mi vida  donde sea feliz, donde este dolor, este miedo, no existan más.
Quiero que por favor me escuches, quiero que por favor me lleves contigo.
                       
"Intento descansar no puedo,escribo esto a las 3:00 am."


                                               Heidi Garcia.